La gran atención mediática y política hacia la recuperación del proyecto europeo (tras la negativa a la Constitución Europea en los referendos francés y holandés) y el nuevo rediseño de la configuración de las instituciones europeas ha dejado en segundo plano un tema de gran trascendencia y que explica el escepticismo, cuando no la oposición, de grandes sectores de las clases populares de los países miembro de la Unión Europea hacia tal proyecto europeo. Me estoy refiriendo a la evolución de la situación social de tal entidad político-administrativa, la cual se está deteriorando, afectando negativamente al bienestar social y a la calidad de vida de sus clases populares y muy en particular de sus clases trabajadoras.
Comencemos con el desempleo, uno de los temas de mayores consecuencias sociales hoy en la UE. El grafico 1 muestra la evolución del desempleo promedio de los países de la Unión Europea de los 15 (...)