Nueva entrega del Atlas Geopolítico de “Le Monde diplomatique”
Un viejo continente de geografía variable
Actualmente resulta difícil orientarse en el mapamundi: desplazamiento de los centros de actividad y de poder hacia nuevos territorios, alianzas inéditas, recomposiciones geopolíticas... Nuestras guías de lectura tradicionales necesitan una revisión. Este es el desafío al que se enfrenta Le Monde diplomatique con la publicación de la nueva versión de nuestro Atlas geopolítico. Esta obra de gran formato de doscientas páginas combina los análisis redactados por reconocidos especialistas y un original enfoque cartográfico para ilustrar estos cambios históricos. Comprender el mundo implica también conocer las visiones que los pueblos tienen de sí mismos y de su lugar en el planeta. Europa es un caso de libro: nadie sabría definirla con seguridad, ni establecer dónde comienza y dónde termina.
por Philippe Rekacewicz,
octubre de 2012
Los alumnos de un liceo de Lille que ese día entraron en la oficina del cartógrafo esperaban una respuesta simple a una pregunta simple: “¿Dónde termina Europa del lado Este?”. Y añadieron: al Oeste, queda claro, hay agua. ¿Pero, al Este?
Los especialistas definen líneas divisorias que no existen: Europa y su “identidad cristiana” (?), Europa continental, Europa “blanca” (?), Europa cultural (?), Europa geográfica (?), Europa administrativa (?), Europa y su “punto débil”, Europa y su frontera natural… ¡Europa! ¡Europa! ¡Europa!
“Los que se proclaman europeos plantean que la Europa de las patrias (?) no es suficiente y que la Europa que va del Atlántico hasta los Urales, es demasiado. ¿Usted se siente europeo?”, le preguntó el periodista Michel Droit a Charles de Gaulle en diciembre de 1965. El presidente francés respondió: “Tomemos las cosas como son. Pues sólo se hace política en base a la realidad: sin duda, uno puede (...)
