Los ecosistemas tienen las formas que conocemos porque, hace veinte mil años, la naturaleza pasó de ser un paisaje dominado por los hielos, en gran parte de Europa y América del Norte, al paisaje actual, donde los hielos están concentrados en los polos y en las alturas. Esta transición, que duró cinco mil años, coincidió con un recalentamiento global de alrededor de 5 ºC, lo que permite estimar que el ritmo natural de cambio de la temperatura a largo plazo es, a escala planetaria, de un grado por milenio.
El problema es que de aquí a 2050 hay que pensar en una duplicación de la cantidad de CO2 (principal gas con efecto invernadero). Esto podría acarrear un aumento promedio de temperatura al menos diez veces más rápido que el ritmo promedio global de cambio desde el último periodo glacial. Según la Agencia Internacional de la Energía (AIE), si el consumo de (...)