Portada del sitio > Mensual > 2013 > 2013/10 > Agonía silenciosa en el corazón de África

No más diamantes ni safaris, las Cancillerías vuelven la cara a la República Centroafricana

Agonía silenciosa en el corazón de África

Doscientos treinta mil desplazados internos, sesenta y dos mil refugiados en países vecinos… Desde el golpe de Estado del 24 de marzo, la República Centroafricana se hunde en el caos. Los gritos de alarma lanzados por Naciones Unidas durante el verano parecen finalmente haber sacado a la “comunidad internacional” de su letargo. ¿Pero será suficiente la resolución que París ha preparado para el Consejo de Seguridad de finales de septiembre?

por Vincent Munié, octubre de 2013

A mediados de septiembre de 2013, los partidarios del presidente François Bozizé, derrocado por un golpe de Estado el 24 de marzo, lanzaron una ofensiva militar en Bossangoa, en el noroeste de la República Centroafricana (RCA). Afirmaban su intención de retomar el control del país caído en manos de la Seleka, una coalición de movimientos rebeldes provenientes del norte.

Alrededor de cien personas habrían muerto en el ataque. Desde marzo, los combates han causado centenares de víctimas y provocado una grave crisis humanitaria que afecta a más de un millón de habitantes obligados a escapar de la violencia, en medio de una indiferencia casi total de la “comunidad internacional”. País pobre –puesto 180 en la clasificación 2013 del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo–, la RCA carece de recursos estratégicos. Pero lo que se perfila actualmente es el desmoronamiento del Estado, con la consiguiente aparición de un vasto territorio de (...)

Este artículo está reservado a suscriptores.

Si usted es suscriptor, introduzca sus datos a continuación para continuar con la lectura.


¿Todavía no es suscriptor?

Elija su fórmula de suscripción y cree su cuenta.

NECESITAMOS TU APOYO

La prensa libre e independiente está amenazada, es importante para la sociedad garantizar su permanencia y la difusión de sus ideas.

Cartografía

Agonía silenciosa en el corazón de África

Miniatura del mapa

Artículo anterior

La credibilidad de los loros

Artículo siguiente

¿Poseer o compartir?