“Señor Presidente, en el punto en que nos encontramos esta noche sé que es políticamente incorrecto oponerse a un compromiso tan trabajosamente elaborado por los dos grupos políticos. Cada uno de los arquitectos de este acuerdo clama victoria, (…). Mis colegas me juran que el principio del país de origen está implícito en el texto de compromiso. Mientras que en el grupo socialista presumen de haberlo matado antes de nacer (…)”. Así describía la europarlamentaria del grupo popular (PPE-DE), Astrid Lulling, el 14 de febrero 2006, el acuerdo de consenso que permitió desbloquear en el Parlamento Europeo la Directiva relativa a los Servicios en el Mercado Interior, siendo aprobada definitivamente por el Consejo Europeo el pasado 12 de diciembre 2006.
En el año 2006 hemos hecho “historia en el ámbito del Mercado Interior”. Se ha logrado un avance en el proceso de integración europea que relanza la “cuarta libertad fundamental”: la (...)