“Nos encontramos ante un muro de legislaciones estadounidenses extremadamente densas, con una intención precisa: utilizar el derecho con fines de imperio económico y político para obtener ventajas económicas y estratégicas”. El 5 de octubre de 2016, Pierre Lellouche, diputado del partido conservador francés Les Républicains, no se anduvo con rodeos ante las comisiones de Asuntos Exteriores y de Finanzas de la Asamblea Nacional francesa. Allí presentó el informe de la misión informativa sobre la extraterritorialidad del derecho estadounidense. Su lectura “da escalofríos”, según las palabras del diputado socialista Christophe Premat.
Habrán hecho falta las dos colosales sanciones económicas infligidas en 2014 a BNP Paribas (8.900 millones de dólares, alrededor de 8.400 millones de euros) y a Alstom (772 millones de dólares, unos 730 millones de euros) para que tanto dirigentes como medios de comunicación franceses tomen conciencia de la voluntad de Estados Unidos de imponer su modelo jurídico y sus leyes (...)