En un bosque de vegetación exuberante y surcado por riachuelos de agua cristalina, los habitantes de una comunidad indígena se alzan contra un proyecto minero que amenaza con destruir la montaña que domina el horizonte en torno a las pequeñas chozas de madera frente a las que los niños juegan descalzos. Entre dos idílicas escenas de recolección en mitad de un paraíso tropical, activistas indignados y las poblaciones locales afectadas denuncian la polución, la contaminación y la violencia. Intercaladas entre secuencias de manifestaciones, imágenes de heridas ensangrentadas, de mujeres gritando junto a hombres con el puño en alto… Cuando vuelven a encenderse las luces, el público aplaude a Pocho Álvarez, el director ecuatoriano de A cielo abierto. Derechos minados, un documental sobre la lucha contra la explotación minera en su país.
El trabajo de Álvarez no es una excepción. Decenas de directores de cine, periodistas, artistas y académicos de todo el (...)