En el conflicto del Golfo, las prácticas de censura se han convertido en reglas explícitas; el ejército francés, haciendo referencia a una ordenanza de 1944, prohíbe oficialmente a los periodistas, a partir de ese momento, estar “en contacto con el fuego”. Los directores de información de los canales franceses han aceptado que las imágenes del frente sean filmadas por los operadores de la Escuela de Cine y Periodismo de las Fuerzas Armadas (ECPA, por sus siglas en francés) y supervisadas, antes de su difusión, por el Servicio de Información y de Relaciones Públicas de las Fuerzas Armadas (Sirpa, por sus siglas en francés), que dirige el general [Raymond] Germanos.
Los periodistas estadounidenses, sometidos a reglas apenas menos severas, impuestas por el Pentágono, se han quejado ante su gobierno y han declarado: “Estas restricciones equivalen a una política de censura por primera vez en la historia de la guerra moderna”.
A decir (...)
