En estos tiempos en los que la información detritus ocupa grandes espacios con un mínimo de ideas promoviendo la involución mental exigidos por el avance del decorado bélico global y los escenarios de guerra permanente, brilla con fulgor propio este pequeño conjunto de cartas y mensajes con valiosísimas reflexiones sobre la mentalidad militar y la paz.
La falsa ilusión de seguridad derivada del mayor potencial armamentístico ya condujo a dos guerras mundiales con decenas de millones de víctimas y un caudal inconcebible de sufrimiento humano. Se ganó la guerra, pero no la paz. Apenas sesenta años después del horror nuclear ordenado por el gobierno de los EE.UU. sobre el pueblo del Japón, la humanidad se encuentra de nuevo en un escenario de tensiones crecientes, crisis económica global incontenible e imperio de la ilusión consistente en que las armas garantizan la seguridad. Así, se expanden los presupuestos y las bases militares en (...)