Portada del sitio > Mensual > 2005 > 2005/07 > El absurdo estatuto del Banco Central Europeo

El absurdo estatuto del Banco Central Europeo

por John Grahl, julio de 2005

En los Estados miembros de la Unión Europea (UE), la alternancia de los partidos en el gobierno permite a veces dar marcha atrás a iniciativas y legislaciones que han fracasado, o abolirlas. En la Unión, en cambio, el pasado se vuelve algo adquirido, que debe ser permanentemente reafirmado y protegido de toda crítica, por justificada que sea. Un ejemplo es el poder no compartido sobre la política monetaria, confiada a un Banco Central Europeo (BCE) que escapa a todo control político.

Mucho antes de que este régimen entrara en vigor, numerosos especialistas de todas las tendencias políticas habían expuesto sus inconvenientes. Sus estructuras eran profun­damente antidemocráticas, en la medida en que privaban a los representantes electos, tanto a nivel nacional como de la Unión, de toda capacidad de intervención sobre las políticas macroeconómicas. Sus prioridades y sus objetivos eran comple­tamente desequi­librados, porque se suponía que el BCE se concentraba en la (...)

Este artículo está reservado a suscriptores.

Si usted es suscriptor, introduzca sus datos a continuación para continuar con la lectura.


¿Todavía no es suscriptor?

Elija su fórmula de suscripción y cree su cuenta.

NECESITAMOS TU APOYO

La prensa libre e independiente está amenazada, es importante para la sociedad garantizar su permanencia y la difusión de sus ideas.