Toda España –la institucional, sin fisuras- apoya la candidatura de Madrid como sede olímpica para 2012. La Familia Real, Gobierno e instituciones del Estado, partidos políticos y muy especialmente la ciudadanía metropolitana de la capital aparecen unidas en la causa de la Olimpíada.
Todos a una, como Fuenteovejuna. También los holdings conformados para la ocasión, desde constructoras a medios de comunicación, sin olvidar grupos que practican, sin el menor rubor la doble militancia, al apoyar, aparentemente con idéntico entusiasmo, las causas de sus patrias de origen y las de sus intereses en otras áreas de su expansión comercial. Es el caso de Carrefour: “Esfuerzo, respeto, distribución, espíritu de equipo, solidaridad, estos valores del olimpismo guían también las acciones de nuestro grupo día a día”, expresaba en su adhesión a París. O el grupo hotelero Accor, que apoya asimismo una sede y a su competidora. No hubo disensiones en la visita de (...)