Portada del sitio > Mensual > 2012 > 2012/02 > Maeterlinck y sus reinos

Se cumplen 150 años del nacimiento del gran escritor belga

Maeterlinck y sus reinos

Bélgica, durante mucho tiempo integrada en los Países Bajos, sometida a la autoridad de los Habsburgo españoles y codiciada por Francia, conquistó su independencia en 1830. Entre tensiones lingüísticas y sociales, hay quien pone en duda su identidad. Pero varios artistas y escritores sabrán ponerla de manifiesto. Entre ellos, se encuentra Maurice Maeterlinck, flamenco de habla francesa, Premio Nobel de Literatura en 1911, que nació hace ciento cincuenta años.

por Franck Venaille, febrero de 2012

Maurice Maeterlinck (1862-1949) es un gran inclasificable. Escribió La vida de las abejas, que no es un documental sobre apicultura sino una reflexión visionaria sobre la unicidad de orden místico del hombre y la naturaleza. Revolucionó el teatro al inventar una nueva dramaturgia–“¿Será absolutamente necesario gritar como Atridas para que un Dios eterno se nos muestre en la vida? ¿No viene nunca a sentarse bajo la lámpara inmóvil?”. Es el primero en introducir en la literatura “la riqueza múltiple de la subconsciencia”, como enfatizó Antonin Artaud. Atravesado por una fuerza extraña, que hace de él –al mismo tiempo– un boxeador, al que pudo verse intercambiar guantazos con el campeón mundial de los mediopesados Georges Carpentier, y un poeta empeñado en dar cuenta de que “allí donde el hombre parece a punto de acabar es probablemente donde empieza”.

Escribe en francés, lengua de su familia, de algunos amigos, de una clase social. (...)

Este artículo está reservado a suscriptores.

Si usted es suscriptor, introduzca sus datos a continuación para continuar con la lectura.


¿Todavía no es suscriptor?

Elija su fórmula de suscripción y cree su cuenta.

NECESITAMOS TU APOYO

La prensa libre e independiente está amenazada, es importante para la sociedad garantizar su permanencia y la difusión de sus ideas.