Este interesante y conmovedor cómic sigue, por situarnos, la senda que abrió Marjane Satrapi con Persépolis. Aquella novela gráfica de memorias de una migrante se ha convertido en sí misma en un género que Findakly y Trondheim han sabido dominar a la perfección y a la que aportan una notable mejora técnica. Formando tándem con tan reconocido historietista (y pareja), Findakly repasa su vida desde la niñez hasta la actualidad. Su condición de árabe, cristiana, iraquí, francesa, migrante, mujer y feminista, le confiere ya de por si una visión de la realidad que merece ser escuchada.
Sin embargo, no es este un libro de Historia, ni un artículo periodístico, y hasta la misma autora reconoce que no desea juzgar a nadie. Esto lo deja acaso para los lectores. Su enfoque, más inteligente y sutil, se fundamenta en los afectos, en el amor por su familia y su país de origen, aunque (...)