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Ira social, vacilaciones del presidente Obama

En Texas, el Tea Party impone su estilo

Dos años de gestión timorata, discursos conciliadores y recuperación económica insuficiente han terminado por desalentar a una parte del electorado, que esperaba más de Barack Obama. Pero la falta de audacia de la Casa Blanca no ha neutralizado la violencia delirante de una oposición de derechas que exclamó que, haga lo que haga, el presidente de Estados Unidos es un “socialista” de dudoso americanismo. El paro masivo y el descenso del nivel de vida confortan al Tea Party, que se presenta como el opositor más firme.

por Robert Zaretsky, diciembre de 2010

La primera gran oleada de inmigración en Texas se produjo entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX. En esa época, los europeos desembarcaban en masa en el puerto de Galveston. Hoy, ese estado sureño, es uno de los principales destinos para los inmigrantes venidos de México y del resto de América Latina que, la gran mayoría de las veces, entran de manera ilegal. Las transformaciones de orden étnico, cultural y lingüístico que ésto conlleva dan lugar a una modificación profunda del paisaje político del estado.

Houston es la ciudad más grande de Texas y la tercera de Estados Unidos. Según el investigador Steven Klineberg, allí el porcentaje de habitantes hispanos ha pasado del 15% en 1980 a más del 40% en la actualidad. Cuanto más envejece la población de origen anglosajón, más rejuvenece la de origen hispano, hasta el punto de representar hoy casi la mitad de la (...)

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