Después de haber vivido toda la Guerra Fría, el 11 de Septiembre, Afganistán, Irak, y tras criticar tenazmente la multiplicación de las estructuras de opresión y el “sistema neocolonial global”, Noam Chomsky sigue teniendo esperanza: “A pesar de haber sido obstaculizado por instituciones y doctrinas, nuestro horizonte moral se expande”. Argumenta: “La de Irak es la primera guerra en la historia del imperialismo contra la cual se protestó masivamente antes de que empezara”.
Sin embargo, lamenta que este progreso sea tan inconstante, lento, agónico. Las regresiones pueden ser muy profundas y nocivas, como el actual caso de “la Administración de George W. Bush, el primer gobierno en la historia de Estados Unidos oficialmente a favor de la tortura”. Otro símbolo que menciona es la tristemente famosa dictadura argentina iniciada en 1976. Aunque también observa un progreso único en la Sudamérica del nuevo siglo, especialmente por los proyectos de integración regional.
Su pasión, (...)