Respaldada por su amplia victoria electoral, la Liga Nacional para la Democracia (LND) de Aung San Suu Kyi podrá imponer en la presidencia de la República al candidato de su elección el próximo mes de febrero. Sólo hará falta que, de acuerdo con la Constitución, ningún miembro de la familia cercana de ese candidato (padre, madre, cónyuge, hijo o cónyuge de este último) sea de nacionalidad extranjera; una disposición que señala en particular a Suu Kyi, cuyos dos hijos son británicos.
Este presidente formará el nuevo Gobierno sin tener que negociar con las demás fuerzas políticas, la mayoría vencidas por la ola LND durante el escrutinio del 8 de noviembre de 2015. De los 92 partidos que concurrían, sólo 12 (de los que 10 tenían una plataforma “étnica” vinculada a las minorías) obtuvieron representación parlamentaria.
La lectura del programa político de la LND muestra que sus estrategas son perfectamente conscientes de la (...)