La cumbre de Ginebra sobre la sociedad de la información se lleva a cabo apenas una década después del advenimiento de Internet como red pública. Esta prontitud se corresponde con el carácter estructurante del nuevo “recurso intelectual”, del nuevo “capital cognitivo”, en vías de transformar profundamente todas las actividades humanas. Hoy se olvida con demasiada frecuencia que fue necesario esperar cerca de tres cuartos de siglo para que se cuestionara el leonino reparto del espectro de frecuencias entre las grandes potencias marítimas. En 1979, y bajo la presión del Movimiento de los Países No Alineados, la Conferencia Administrativa Mundial de la Radio (CAMR) convocada por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), desmanteló el monopolio de las ondas.
La historia de la noción de “sociedad de la información” está cargada de ambigüedades. La noción más reciente, de “sociedad global de la información”, estrenada en 1995 por los siete países más industrializados (G7), (...)