Esta novela gráfica se enraíza en una larga tradición literaria consistente en introducir personajes de ficción en acontecimientos históricos. La idea es hacerlos evolucionar junto con el devenir de los hechos reales, lo que además de producir momentos de interés dramático, proporciona un buen método para explicar, de un modo didáctico, el contexto en el que se producen dichos hechos.
Nada mejor que empatizar con una militante sufragista para comprender la lucha por el voto femenino que se desarrolló a principios del siglo pasado en Gran Bretaña. Y ese es justo el papel que corresponde a Sally Heathcote quien, tras entrar al servicio de la histórica líder feminista Emmeline Pankhurst, se convertirá en una aguerrida activista. Así, a través de sus ojos, comprenderemos la crudeza autoritaria del patriarcado imperante en aquellos años, así como la evolución de las estrategias de lucha política que se emplearon contra él. Es decir, desde las (...)