En Bruselas, el parque Léopold alberga un museo insólito que, desde su inauguración el 6 de mayo de 2017, ya ha atraído a medio millón de visitantes. Entramos por una esclusa de seguridad en la que unos vigilantes verifican nuestra identidad, escanean con rayos X nuestros efectos personales y comprueban nuestra temperatura mediante una cámara térmica.
Nos colocamos los auriculares de la audioguía y seleccionamos uno de los veinticuatro idiomas oficiales de la Unión Europea. “Bienvenido a la Casa de la Historia Europea, un proyecto del Parlamento Europeo. A medida que le guiemos a través de la exposición, comprobará que no le estamos contando la historia de cada nación europea”.
La exposición permanente comienza con la presentación de artefactos relacionados con la geografía del continente y el mito griego de Europa. Tras lo cual, en el siglo XVIII, llega la hora de mencionar el régimen nazi y la Unión Soviética. “Durante la (...)