- ANNE-GAËLLE AMIOT. – Suvernirnica (‘Tienda de recuerdos’), 2022
En julio de 2019, Emmanuel Macron acude a Belgrado para la primera visita oficial de un presidente francés en Serbia después de casi 18 años. Francia confía en mostrar su voluntad de volver a invertir en los Balcanes occidentales, “un punto ciego de la diplomacia francesa”, según Nathalie Loiseau, por entonces ministra de Asuntos Europeos. Acompañado de una delegación que cuenta con los dirigentes de grandes grupos empresariales franceses, Macron promete a su “amigo”, el presidente serbio Aleksandar Vucic, “entablar relaciones distendidas”. “Vinci dirigirá el aeropuerto de Belgrado, Suez administrará grandes proyectos municipales en Belgrado y estamos en conversaciones con Alstom y Egis sobre la construcción de un metro en Belgrado”, había prometido el presidente serbio con ocasión de una visita a París en 2018.
Con 1,7 millones de habitantes (...)