El Gran Imbécil es el ensayo político-sarcástico sobre la relación entre el dictador y su pueblo que Curzio Malaparte (1908-1957) dedica a Mussolini.
Autor de dos impresionantes novelas –Kaputt y La piel– Malaparte fue encarcelado por el Duce y sus escritos prohibidos en Italia. Hasta 1950 esta obra no vio la luz pues su redacción sufrió constantes interrupciones durante treinta años. Malaparte puede mostrarse compasivo, poético, contradictorio y ferozmente despiadado. Atribuye a su propia madre un delirio de amor por el hombre que salvaría a Italia y al resto de Europa y que sería “de manera inconsciente el vehículo para la inyección del bacilo fascista en las venas de la nación germánica”.
Malaparte ameniza su retrato con alguna anécdota: una noche, el Duce se coló de incógnito en un cine romano y cuando se proyectaba el documental previo al largometraje (especie de No-Do) y apareció Mussolini inaugurando un monumento, el (...)