Desde los tiempos de la Grecia clásica se sospechó de la existencia la Terra Australis Ignota, el gran continente que Ptolomeo situara al sur del océano Índico. Fue buscado por navegantes y aventureros e incluso cuando en 1606 se realizó el primer avistamiento de Australia se creyó haber dado con él, hasta que el holandés Abel Tasman lo desmintió cuando circunnavegó Oceanía, alcanzando la latitud 42º S y descubriendo a su paso la isla que lleva su nombre.
Así las cosas, en vísperas de la independencia de Estados Unidos, la corona británica encomendó al capitán James Cook la resolución del enigma, quien con tal propósito en abril de 1772 inició su segundo viaje alrededor del mundo del que no regresaría hasta julio de 1975.
Este libro recoge la historia de dicho periplo escrita de la mano del propio capitán Cook y en él se describen los pormenores de sus aventuras y descubrimientos (...)