Desde su creación en 1948 Israel viene llevando a cabo, y de forma ininterrumpida, un esfuerzo notorio de reafirmación y justificación de su propia identidad que deja a pocos indiferentes. Y una clave fundamental de ese proceso es su aceptación por parte de la opinión pública europea, envuelta en un abanico de sentimientos contrapuestos que van desde la compasión por las atrocidades de la Shoah a la consternación por sus inclementes relaciones con los palestinos, bordeando siempre el riesgo de ser acusada de antisemita.
En ese contexto se circunscribe este libro del poeta y periodista disidente israelí Yitzhak Laor. Va dirigido a los lectores europeos a los que avisa de los riesgos de confundir los esfuerzos reales por la consecución de la paz en Palestina con el pacifismo de corte sionista subyacente en los escritos de autores muy reputados en Europa como Amos Oz, David Grossman o Abraham Yehoshua, contra los (...)