- Selçuk
En el verano de 2022, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha rebajado sus perspectivas para la economía mundial. La institución con sede en Washington prevé ahora que el producto interior bruto (PIB) mundial para 2023 sea dos puntos porcentuales inferior a lo que auguraba en enero (es decir, una corrección más radical que la realizada por la organización en 2008 tras la quiebra del banco Lehman Brothers). Tal rebaja representa un déficit de actividad de más de 1,7 billones de dólares, una sacudida del tamaño de la economía canadiense.
Esta recesión económica afecta por supuesto a la economía francesa. En el Consejo de Ministros del 24 de agosto, el presidente francés, Emmanuel Macron, alertó al Gobierno del “fin de aquello que podía parecer una forma de abundancia”. En espacio de unos pocos meses, llama la atención el (...)