A la vida de Roger Casement (1864-1916), protagonista de la última novela histórica de Vargas Llosa, dedicó hace quince años el escritor alemán W.G. Sebald un capítulo magistral de sólo 33 páginas en Los anillos de Saturno, libro inclasificable como el resto de toda su obra.
La antítesis literaria de Mario Vargas Llosa es W.G. Sebald: uno, austero y sobrio en el uso del lenguaje; el otro –Vargas Llosa– florido y hasta malgastador de palabras, sobre todo diminutivos. ¿Escribiría Sebald (por otra parte fallecido en 2001) que una “casita es diminuta” (pág. 383) o que una plaza es una “pequeña placita” (pag. 450), como hace el escritor peruano? Todos entendemos que una placita es siempre pequeña, y que una casita es diminuta. Sin embargo, el premio Nobel incurre en toda clase de melindres descriptivos, para irritación del lector.
Dicho esto, El sueño del celta se convierte muy pronto en una pesadilla dividida (...)