Ya se han emitido dieciocho episodios de la serie noruega Occupied en la cadena pública franco-alemana Arte. ¿Ficción o advertencia? Moscú ocupa Noruega (con el consentimiento de la Unión Europea) para garantizar el suministro de gas y petróleo en Europa. La Unión Europea no tiene el mejor papel de la serie, pero es Rusia la que invade, manipula, amenaza, mata. No obstante, no se trata, nos dicen, de “designar a un malo”. Incluso la Embajada rusa en Oslo había sido informada sobre el proyecto.
Cabe dudar de que el resultado le fascine. La serie es angustiante y se sugiere encarecidamente el paralelismo entre rusos y nazis (quienes sí ocuparon Noruega), puesto que se compara al primer ministro noruego, que colabora con Moscú, con Vidkun Quisling y con Philippe Pétain. Cuando se concibió la segunda temporada, emitida recientemente en esta cadena, acababa de producirse la anexión de Crimea. “Avanzábamos de forma paralela (...)