Bajorrelieve

Su reciente fallecimiento (septiembre de 2009) a la edad de 67 años, cierra definitivamente una obra poética todavía prometedora, más allá de los numerosos premios obtenidos, pero en cambio adquiere esa extraña actualidad que imponen los poetas muertos. La edición de Juan José Lanz de dos de los libros más profundos, recientes y aclamados de D.J. Jiménez, Bajorrelieve e Itinerario para náufragos, es hoy un magnífico homenaje. Desde 1982, el poeta, periodista y pintor, antiguo militante del PCE, vivía retirado de la política y a espaldas de aquellos círculos y ­tertulias literarios que frecuentó en Madrid. Se refugió en Priego (Cuenca) para dedicarse de lleno a la poesía que de tener un tono grandilocuente y elegíaco, pasó a otro mucho mas próximo y modesto (aunque formalmente muy elaborado), y éste se ajusta al parecer a su entendimiento de la poesía no como “el arte (...)