Utopías en concreto

Fue una época de insurrección armada y de ideas transfiguradoras. Fue una época en la que se inventó la palabra “comunismo”, en la que cuajó la cuestión feminista, en la que se concibieron sistemas propicios al establecimiento de la igualdad real. Los herederos críticos de los ideales confiscados de la Revolución Francesa, inspirados por Charles Fourier, Pierre-Joseph Proudhon, Étienne Cabet y Karl Marx, formaban una red de acción y debate. Lo suyo, por lo general, fueron la cárcel o el exilio, y la historia oficial ha desdibujado y hasta borrado su recuerdo. Pocos conocen ya, por ejemplo, al tipógrafo Pierre Leroux (1797-1871), un desbordante caudal de ideas que durante mucho tiempo mereció el apoyo, cuando no la veneración, de George Sand, y autor de ensayos que causaron sensación, como De l’humanité (1840). Su “comunionismo”, a la vez ciencia y religión, era una doctrina social basada en la fraternidad, que propugnaba (...)