- M. Ángeles Díaz Barbado. – Sin título, 2022
1-. Gustav René Hocke en su ya clásico estudio Die Welt als Labyrinth traza la línea de continuidad, a lo largo de las épocas, de esta figura que, en sus variaciones, expresa como ninguna otra la concepción del mundo que ha tenido la civilización occidental. Desde el laberinto clásico, el de Cnosos, que dio lugar al mito en su primer relato, hasta las formas medievales o manieristas que en la época moderna dibujan la errancia del hombre barroco, perdido en un mundo de signos que intenta descifrar, viajan diversas expresiones que en la historia de la iconografía moderna nos muestran el complejo repertorio de interpretaciones del laberinto.
La centralidad de esta figura y su permanencia a lo largo de la historia nos permite pensar que ella como ninguna otra expresa (...)