Si tanto en Japón como en Francia la esperanza de vida masculina avanza, en Rusia es caótica. Así lo demuestra la pirámide de población (arriba): la base se estrecha rápidamente –los grupos de jóvenes de 10 a 18 años se vuelven menos importantes–, mientras que la mortalidad de los hombres de entre 45 y 50 años aumenta desde mediados de los años 1960.
En total, la población decrece, incluso con la aportación de la inmigración (a la derecha).
MAX PLANCK INSTITUTE FOR DEMOGRAPHIC RESEARCH 2010; ROSSTAT, ANUARIO DEMOGRÁFICO 2010; WWW.DEMOSCOPE.RU