Más de 2.000 millones de personas no tienen en la actualidad acceso regular a alimentos inocuos, nutritivos y suficientes. Unos 690 millones de personas padecen hambre y la pandemia de la Covid-19 podría añadir entre 83 y 132 millones de personas a esta cifra, dependiendo de la perspectiva de crecimiento económico. En pleno siglo XXI de avances tecnológicos y milagrosas revoluciones agrarias, una de cada 9 personas no tiene acceso a un derecho humano tan básico como es el derecho a la alimentación.
Por otro lado, la obesidad avanza imparable en todos los rincones del globo, afectando a todas las capas sociales. Desde 1975, se ha casi triplicado en todo el mundo. En 2019, cerca de 2.000 millones de adultos tenían sobrepeso, de los cuales, más de 650 millones eran obesos.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las diez causas principales de fallecimiento en nuestra época están vinculadas a la salud y la alimentación. Y la pandemia de la Covid-19 va a suponer un retroceso importante en la lucha contra el hambre, la obesidad y la pobreza, haciendo prácticamente imposible alcanzar las ambiciosas metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
José Graziano da Silva ha contribuido, durante más de 30 años, a las cuestiones relacionadas con el hambre, la seguridad alimentaria y el desarrollo rural en el plano académico, profesional y político. Es considerado uno de los grandes expertos mundiales en estas temáticas. Como director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) de 2012 a 2019, implementó la experiencia adquirida con el programa Fome Zero (Hambre Cero) en Brasil, el cual concibió y posteriormente dirigió mientras ejercía como ministro extraordinario de Seguridad Alimentaria y Lucha contra el Hambre durante el primer gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
El programa Hambre Cero es considerado como el mayor y más exitoso programa contra el hambre en el mundo, que sacó del umbral de la pobreza a cerca de 41 millones de ciudadanos y ciudadanas brasileñas. Graziano da Silva introdujo un nuevo modelo de desarrollo centrado en la erradicación del hambre y la inclusión social, vinculando las políticas macroeconómicas, sociales e industriales. Este programa aceleró considerablemente los progresos en la reducción del hambre en el Brasil. Como resultado, el país cumplió los objetivos de la Cumbre Mundial sobre la Alimentación y el primer Objetivo de Desarrollo del Milenio. En 2014, se consideró que Brasil se había convertido en el primer país en desarrollo en haber erradicado el hambre. En 2015, en Nueva York, la comunidad internacional reconoció el enfoque brasileño del Hambre Cero como uno de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (ODS2): erradicar el hambre y todas las formas de malnutrición para 2030.
En la actualidad, Da Silva dirige el recién creado Instituto Fome Zero (Hambre Cero) en Brasil y da conferencias sobre la cuestión del hambre y la alimentación sostenible en foros y universidades de todo el mundo.
“El retroceso de la lucha contra el hambre en la era post-Covid-19”, por José Graziano da Silva
Fecha: Lunes 25 de enero / 18h00h
Lugar: A través del canal de YouTube de La Casa Encendida: https://www.youtube.com/user/lacasaencendida
Coordinan: Le Monde diplomatique en español y el Instituto de Estudios de Naciones Unidas